viernes, 31 de diciembre de 2010

Fin de año (otra vez!)

Estamos a unas 24h de fin de año, y como hice el año pasado, este es un tema obligado para despotricar. Ya sea quejándose de las navidades, de la familia o directamente de todo el mundo.

Posiblemente esté pasando las navidades más aburridas de mi vida, y no porque no tenga para salir, sino por pura pereza. Hace años el simple hecho de que fueran estas fiestas me tendría en vilo de tal forma que aunque hiciera lo mismo que en un díe normal, todo sería diferente. Sin embargo creo que esos ños quedaron atrás… y la verdad que hace menos poco de lo que me gustaría.

Las navidades llegaron casi sin que me diera cuenta. Cuando era pequeño contaba los días para que el 22 de diciembre terminaran las clases. A día de hoy, terminé las clases el 22… y ni me di cuenta de que día era. Es más, lo primero que hice fue mentar a la familia de la profesora que me puso un examen ese día, y decidir que esa mañana no iría a clase porque quería dormir. Me resbalaba la idea de que fuera el sorteo del gordo, o como se llame, y no tenía muchas ganas de hacer nada: lo triste es que 9 días después sigo sin encontrar esas ganas.

No hace un tiempo demasiado malo, y Coruña es un herbidero de vida por las calles. Tengo regalos que comprar y mucho que estudiar, y sin embargo me sigue resbalando. Hay amigo a los que llevo semánas sin ver (o más) y me sigue resbalando. Tengo cartas por contestar…. Y seguimos así.

En unos años he pasado, en las mismas fechas, de tener una energía encomiable fruto de la alegría navideña (o como cojones se llame) a una total indeferencia por el mundo que me rodea. No hay mejor lugar que tu casa cuando tienes una connexión a Internet de 3MB (que por una vez funciona), mucho videojuegos, SeriesYonkins, y una guitarra eléctrica nueva que puedes aporrear (casi literalmente). No olvidemos Spotify y sus inagotables horas de música con las que poder escoger el tema del añ, la canción que ha definido los último 365 días… y la he encontrado, por claro: tenía que hacer una lista. Angels de Black Mountain, uno de mis grupos revelación del año.

Por todo eso: para qué salir? Cuando tienes casi todo lo que quieres, convertirse en un ermitaño es más fácil de lo que crees, porque cuando vuelves a ver la luz del Sol hechas de menas tu casa, y te sientes cansado con el primer paso que pones fuera de la puerta. Así como te arrepientes de no haberte quedado en el sofá con esa bonita guitarra nueva a la cual no sabes ni coger decentemente, pero como siempre quisiste tener una: qué más da! Con el tiempo tu indiferencia hacia los demás crece, y los ves más como un engorro que como una ayuda. Gente, es imbécil.

Por suerte esto no es así del todo cierto. Sí creo ue la gente es idiota. Lo siento es una relidad y contra eso no se puede luchar, pero forman un rebaño de borregos al cual estaría bien poner al borde de un barranco. Y sí tranquilos, sé lo que es ver la luz del sol, pero reconozco que no hay nada más gratificante que permanecer un par de días incomunicado en casa, solo para mantener ese punto de locura y olvidar que la gente te asquea. Sin embargo lo que dije de la canción iba enserio (hasta hice una lista en los descanasos de chapatoria. Feliz año!

1 comentario:

  1. Buena actualización.

    Yo hoy me he levantado de una mala hostia espectacular. Y me siento identificada con tu entrada, sí. No salgo mucho.

    ¡Un beso! Que tengas una buena noche

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